Imagínate cuerpos balanceándose al ritmo de un buen beat, y de repente, se lanzan a follar duro en una pista llena de confeti. Pasan de girar a embestir sin parar, a veces con ropa ajustada como shorts de cuero que bajan de un tirón. Los espejos de pared reflejan cada ángulo mientras las manos agarran caderas con fuerza.