En estos videos, chavales de 18 y 19 años se dan caña en cuartos desordenados tipo dormitorio o en coches estrechos. Una tía en vaqueros rotos se deja lamer en un futón viejo mientras gime bajito. Luego se giran rápido, como si pelearan por espacio en una cama chica. Esa locura juvenil se nota en cada plano.